Salmos 118: 5-6 “En mi angustia oré al Señor, y me respondió y liberó. El Señor está de mi parte, por tanto, no temeré. ¿Qué me puede hacer un simple mortal?”

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¿Te llegó algo inesperado? ¿Te angustia, te llena de temor una mala noticia, una suspensión o despido, una enfermedad, una deuda o crisis familiar? Clama al Señor, sabiendo que Él te ama y está de tu lado aunque ahora no veas salida y todo camino esté cerrado. ¡Él cambia tu temor en confianza!

Hoy, Domingo, día del Señor, es un día especial para romper yugos, quebrar cadenas y proclamar victoria. Juntos y en armonía venceremos todo temor y veremos obrar Su Mano de poder. Ven con fe a Su Presencia, aferrado a Sus Promesas; ¡Él está por hacer algo glorioso en tu vida!

Ora conmigo; Padre celestial, gracias por saber cuánto me amas y que estás de mi lado. Te entrego toda carga, creyendo que Tu Promesa se cumple en mí. Renuncio al temor y recibo fe, paz y esperanza. En el Nombre de Jesús, amén.